El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció este miércoles “sanciones punitivas adicionales” inmediatas contra Irán, luego del ataque que esa nación hizo contra dos bases iraquíes que albergan tropas estadounidenses, en venganza por la muerte del general iraní Qassem Soleimani.

Washington continuará con la “máxima presión” sobre Irán, enfatizó Trump, durante un discurso público ofrecido a su nación, donde estuvo flanqueado por el secretario de Defensa de los EE.UU., Mark Esper; el vicepresidente, Mike Pence; el secretario de Estado, Mike Pompeo; y líderes militares.

No hay fallecidos

Sobre el ataque, mencionó que “todos los soldados están bien, nadie fue herido en Irak”.

“Nuestras fuerzas aéreas y soldados están preparados para todo. Ningún estadounidense o iraquí falleció tras este ataque, porque tomamos medidas de precauciones, gracias al sistema antimisiles”, recalcó el mandatario.

Indicó que, por el lugar al que apuntó Irán, que no causó mayores daños, esa nación “parece que se está retirando, lo que es bueno para todas las partes afectadas y algo muy bueno para el mundo”.

Sobre la muerte de Soleimani, reiteró que EE.UU. debió haberlo matado “hace mucho tiempo”. Mencionó que: “la semana pasada tomamos la decisión de detener a un brutal terrorista”.

Describió a Soleimani como el responsable de “entrenar a ejércitos rebeldes, apoyar sangrientas guerras civiles y plantar bombas antipersonales”.