Agentes españoles creen que Emilio Lozoya lava dinero para alguna organización mafiosa de Rusia, de acuerdo con fuentes cercanas a la investigación citadas por el diario El País .

Durante su primera audiencia, Lozoya aseguró que llevaba dos días en España, pero la Policía Nacional sostiene que desde encontró indicios de su presencia en varias localidades del país desde que inició este año.

Ante la sospecha de que el exdirector de Pemex ya se encontraba en el país ibérico, los agentes centraron su atención en La Zagaleta, un exclusivo resort ubicado en Málaga, “pero apenas salía. Por lo que decidieron retrasar el arresto hasta este miércoles, cuando lo cazaron al aprovechar que abandonó el complejo residencial en un vehículo que había acudido a recogerlo”, explica El País.

“Los agentes sospechan, además, que detrás de Lozoya iba su guardia pretoriana, un séquito de ‘personal de seguridad ruso’ que le ha dado cobertura durante su estancia en España. Los investigadores creen incluso que Lozoya… podía estar blanqueando dinero para alguna organización mafiosa procedente de ese país, según fuentes próximas a la investigación”, destaca el diario en la nota publicada en su sitio web.

El medio español consigna además que los investigadores aún indagan la ruta de Lozoya: buscan saber si fue desde Alemania o San Petesburgo, Rusia, desde donde arribó a España.

En el momento de su detención, Lozoya -quien no opuso resistencia a los agentes- llevaba como identificación una licencia de conducir mexicana falsificada, con su fotografía pero el nombre de otra persona: Jonathan Solís Fuentes, según el mismo rotativo.

“De lo que se desprende una intención de sustraerse a la acción de la justicia”, señala el auto del juez Ismael Moreno, quien decidió enviar a prisión a Lozoya por “fundado riesgo de fuga”, al no tener arraigo en España y ante la gravedad de la pena que se le puede imponer, de 15 años de cárcel.

Lozoya fue trasladado inicialmente a los calabozos de los juzgados de Marbella, desde donde hoy declaró por vídeoconferencia, y por la tardenoche de este jueves fue enviado a la cárcel de Alhaurín de la Torre, Málaga.

Las autoridades mexicanas tienen ahora 45 días para presentar la solicitud de extradición.

Sobre el exfuncionario peñista pesaba una orden de busca y captura internacional desde mayo de 2019 por su presunta implicación en los sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, cuyos pagos ilegales se sospecha fueron usados para financiar la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto.

Tras su fuga comenzó la colaboración entre la Fiscalía mexicana y la Policía Nacional, con la que se obtuvieron indicios que situaban a Lozoya en varias localidades españolas, pero “el alto poder adquisitivo y sus lazos internacionales” complicaban su localización, según la Policía española.

La orden de detención internacional detalla que Lozoya adquirió un bien inmueble “con conocimiento de que los recursos utilizados proceden de una actividad ilícita” y con el propósito de ocultar el origen de esos fondos.

Ello se habría hecho en colaboración con otros dos imputados: su hermana Gilda Susana Lozoya y el empresario Alonso Anciara Elizondo, detenido también en España en mayo del año pasado. Además, la propia madre de Lozoya fue detenida en Alemania en julio de 2019 acusada de lavado de dinero.