La policía de Highland Park informó que detuvo sin incidentes al sospechoso del tiroteo en un desfile por el Día de la Independencia que dejó seis muertos y más de 20 heridos.

En conferencia de prensa, las autoridades identificaron al presunto autor del tiroteo como Robert Crimo, un joven de 22 años.

El principal sospechoso de matar a seis personas y herir a otras 24 en un tiroteo masivo este lunes en la localidad de Highland Park (Illinois) durante un desfile del 4 de julio fue detenido por las autoridades, dijo el jefe de Policía de la localidad, Lou Jogmen.

“Vamos a tener que conectar (al detenido) con la escena del crimen, queremos seguir el proceso adecuado”, dijo Jogmen al explicar que el arrestado es Robert Crimo, cuyo nombre e imagen revelaron las autoridades como “persona de interés” en el crimen pero que no está oficialmente considerado como sospechoso todavía.

Jogmen explicó a los periodistas que ahora la policía deberá interrogar a Crimo para determinar su conexión con el tiroteo y que, si todo sigue su curso sin incidentes, no habrá más actualizaciones a la prensa hasta mañana.

El tiroteo en un 4 de julio se suma a otros acontecimientos que han hecho añicos los rituales de vida de los estadounidenses.

En los últimos meses, escuelas, iglesias, tiendas de comestibles y, ahora, desfiles de la comunidad se han convertido en escenarios de masacres. En esta ocasión, el derramamiento de sangre se produce cuando la nación trata de encontrar un motivo para celebrar su fundación y los lazos que aún la mantienen unida.

La alcaldesa Nancy Rotering dijo que la violencia “nos ha sacudido hasta la médula”, y añadió que “en un día en el que nos reunimos para celebrar la comunidad y la libertad, estamos, más bien, de luto por la trágica pérdida de vidas y enfrentando el terror que se nos ha impuesto”.

Los disparos se registraron en un punto de la ruta del desfile en el que muchos residentes se habían colocado a primera hora del día para tener una vista privilegiada de la celebración anual.

Las docenas de balas disparadas obligaron a cientos de asistentes al desfile a huir, algunos de ellos ensangrentados.