Sonora, cuna del otrora hegemónico Partido Revolucionario Institucional (PRI), vive unas intensas elecciones a gobernador con una contienda llena de violencia y muy cerrada que podría dar como ganador a Alfonso Durazo, exsecretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana del gobierno federal.

El jueves, sicarios mataron con diez balazos a Abel Murrieta, candidato a alcalde de Cajeme. Además era abogado de la familia LeBarón en el juicio por la brutal matanza de los mormones de 2019 en la región, un atentado que dejó seis niños y tres mujeres sin vida.

El atentado contra Murrieta es un reflejo de la violencia contra los políticos en esta región, azotada por la inseguridad, y en el país, que suma más de 80 políticos asesinados durante la campaña, 32 de ellos aspirantes a algún cargo.

El próximo 6 de junio, más de 93 millones de mexicanos están llamados a las urnas para elegir a los 500 diputados federales, 15 de 32 gobernadores estatales, 30 congresos locales y mil 900 ayuntamientos, en lo que se consideran los comicios más grandes de la historia de México.

Desencanto ciudadano

Elizabeth Federico, vendedora de frutas y verduras, considera que en Sonora la delincuencia organizada ha azotado en distintos municipios y aseguró que ha escuchado que Durazo tuvo un desempeño regular cuando estuvo al frente de la Secretaría de Seguridad en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Sí se puede dar (la victoria de Durazo), porque la gente ya no quiere más de lo mismo”, aseguró Federico desde el mercado municipal de Hermosillo, desencantada con los políticos porque solamente buscan su “beneficio” personal.

Jorge Robles, vendedor de lotería en el centro de Hermosillo, lamentó el clima de inseguridad que se vive en Sonora y denunció que los políticos cuando están en campaña hacen grandes promesas, que cambian luego de ganar la elección.

“Puede ser porque tiene experiencia y puede sacar a Sonora de la situación que estamos, pero no es suficiente. Se necesita el apoyo de la gente que lo esté ayudando, que sean honestos, que no sean corruptos”, apuntó Robles.

Cuna del PRI

Actualmente, el estado está gobernado por Claudia Pavlovich, del PRI. El partido que durante décadas mandó en el país, tiene un bastión en el norteño estado de Sonora, donde solo ha perdido en una ocasión desde 1929.

Fue el 4 de marzo de 1929 cuando el sonorense Plutarco Elías Calles -presidente de México entre 1924 a 1928- fundó el PRI, que a la postre se convirtió en el partido hegemónico en México por 70 años.

De hecho, en la actual campaña rumbo al 6 de junio, los tres candidatos con mayores posibilidades de ganar la gubernatura de Sonora iniciaron su carrera política en el PRI.

Elecciones competidas

Durazo es hoy abanderado de la coalición “Juntos Haremos Historia en Sonora”, que conforma Morena junto con el Partido del Trabajo (PT), el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y el Partido Nueva Alianza (Panal).

Pero Durazo militó en el PRI desde 1973 hasta 1999, cuando renunció para sumarse al equipo del expresidente del Partido Acción Nacional (PAN) Vicente Fox, con quien se desempeñó como secretario particular y después como portavoz.

Después saltó al Partido de la Revolución Democrática (PRD) y posteriormente a Morena.

Ernesto “el Borrego” Gándara abandera la alianza “Va por Sonora”, que conforman el PRI-PAN-PRD. Como anécdota, tuvo que desafiliarse del PRI debido a que los estatutos de estos partidos no permitían postular a militantes activos de uno u otro.

Según la mayoría de encuestas, Durazo y Gándara se disputan las elecciones con una intención de voto cercana al 40 % cada uno, si bien el exsecretario de Seguridad de López Obrador llevaría la delantera por la mínima.

Mientras, Ricardo Bours renunció en 2019 al PRI para ser el candidato de Movimiento Ciudadano (MC) a la gobernatura, aunque todos los sondeos lo sitúan en un lejano tercer lugar.

La imparable violencia

El estado de Sonora, el segundo más extenso del país, registró en 2020 un total de mil 584 homicidios dolosos, en un México que registró 34 mil 554 crímenes.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana más reciente, el 63% de la población de Hermosillo, capital de la región, se siente insegura.

Según las llamadas al número de emergencias 911, los delitos patrimoniales como asaltos, robo de vehículos, robo en casas y comercios, han venido a la baja en Sonora.

Pero los crímenes de alto impacto son los que han ido al alza en los últimos dos años, cuando Alfonzo Durazo era el responsable de la seguridad en México.

“El principal problema de los sonorenses es la inseguridad. El año pasado estuvo por encima de la salud en plena pandemia”, declaró Manuel Emilio Hoyos Diaz, director del Observatorio Sonora por la Seguridad.

El especialista recordó que en Sonora 2020 fue el año con más homicidios dolosos, unos crímenes normalmente con el sello de la delincuencia organizada.

“En Sonora parece que vivimos tres realidades: la que viven día a día los ciudadanos; la de algunas autoridades que ven el problema a medias y la de los tomadores de decisiones”, apuntó el experto.

Lamentó que “en este caso, de quienes aspiran a gobernarnos, no hemos visto hasta el día de hoy propuestas concretas en el corto, mediano y largo plazo” sino simples “promesas”.