Pese al esfuerzo de instituciones públicas, en la realidad no han cambiado significativamente las cifras o números de casos de violencia familiar en la entidad, algo está fallando en el intento; lo cierto es que este tipo de violencia ya no es coyuntural en Sonora.

Es momento de cuestionar nuestros propios criterios y formas de convivencia en el hogar, pero sobre todo revisar qué mejoras podemos hacer también en las políticas públicas para revertir esto que ya se convirtió en una amenaza social.

De entrada, no basta con saber cuántas carpetas de investigación se han iniciado y cuantas llamadas de auxilio al 911 fueron atendidas, es necesario que las autoridades proporcionen datos más específicos.

Es decir, sabemos que hay varios tipos de violencia: psicológica, física, verbal, sexual, etcétera; pero no sabemos ni quién la ejerce ni dónde la ejerce.

Un mapa más específico de los perfiles de los atacantes, como geográfico de en qué colonias o zonas hay mayor incidencia, nos ayudaría a acercarnos más al origen del problema.

Rangos de edades, antecedentes familiares, nivel educativo, lugar de residencia, contexto…en fin, es información que la autoridad ya tiene en cada uno de los expedientes de investigaciones iniciados, pero ha faltado segmentar y hacer pública esa información fundamental para delinear la estrategia de prevención.

Hoy gracias a ese trabajo estadístico sabemos al menos que

  • El 18.8% de las mujeres sonorenses se sienten inseguras
  • A nivel estado las carpetas de investigación el 2020, fueron más del doble que hace tres años.
  • El 53% fueron de Hermosillo, donde también se acumularon más del doble que hace tres años.
AÑO SONORA Hermosillo
2017 2,428 1,002
2020 5,450 2,897

 

  • De 2016 a 2018 hubo una tendencia a la baja en este delito en Sonora, pero a partir de 2019 hubo un incremento de 52%, llegando en dos años a la cifra más alta desde que se tiene registro.
  • Incluso, en 2020 la tasa de denuncias por cada 100 mil habitantes en el estado, fue superior a la nacional (173 VS 178.3), colocando a Sonora en la posición 15 entre las entidades con mayor tasa.
  • En Hermosillo el comportamiento es similar al estado, con una tendencia a la baja entre 2016 y 2018; y un repunte a partir de 2019.
  • Ocho municipios concentran 9 de cada 10 denuncias por violencia familiar en Sonora: