Hace unos días el candidato demócrata Joe Biden a las elecciones presidenciales de Estados Unidos expresó durante una entrevista con la Asociación Nacional de Periodistas Afroamericanos e Hispanos que si gana en noviembre, detendrá la construcción del muro entre México y Estados Unidos, además de regular la situación de a 11 millones de inmigrantes indocumentados.

Después de criticar el discurso de Donald Trump en contra de las comunidades latinas y los dreamers, Biden promete que mandará una ley de reforma migratoria al Congreso para mantener a las familias unidas dentro del país y facilitarles el apoyo necesario mientras se conduce su proceso, aunque  advierte que “costará mucho dinero, pero será más barato que levantar un muro”.

Pero estas propuestas contrastan con las cifras récord de deportación a inmigrantes latinos y mexicanos durante su vicepresidencia en el gobierno de Barack Obama, en la que se deportaron a casi 3 millones indocumentados, en comparación con el gobierno de George Bush con 2.01 millones o incluso, el de Donald Trump que ha deportado a 800,000 personas en lo que va de su administración, de acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.

Joe Biden aspira a llegar a la presidencia con el apoyo de los ciudadanos de clase media quienes, afirma, han construido al país; en tanto que en diversas ocasiones ha señalado que los latinos laboran todos los días pese a la crisis por la COVID-19 y exhorta a proclamar a Estados Unidos como una nación de inmigrantes en lugar de construir muros.

La victoria en noviembre Biden depende en buena medida del voto latino especialmente en los estados cruciales, pero el discurso de Biden también abarca la agenda nacional en donde retoma las estrategias y acciones llevadas a cabo cuando ejerció la vicepresidencia en el gobierno de Barack Obama.

Campaña a distancia

Debido a las medidas de confinamiento que se están viviendo, a diferencia de Trump, Joe Biden ha optado por llevar su campaña a distancia y por medios electrónicos, promoviendo sus propuestas políticos a través de reuniones vía Zoom para conservar el distanciamiento social.

Recientemente, el candidato demócrata y el ex presidente Obama platicaron sobre la crisis que enfrenta el país en la emergencia sanitaria por la COVID-19 en “A Socially Distanced Conversation”, donde Biden expresó que busca instaurar nuevamente el programa “ObamaCare” ya que no es posible separar la salud pública del progreso económico en un país, con más de 20 millones de personas sin acceso al sistema de salud, expresó.

Las elecciones de Estados Unidos se desarrollan en medio
de una agenda compleja en salud pública, economía, temas raciales, migratorios y diplomáticos que influye en el discurso de los candidatos.

Trayectoria

Como vicepresidente, Joe Biden elaboró estrategias para limitar la venta de armas y puso un foco de atención en las denuncias de abuso sexual en los campus universitarios, apoyó la búsqueda de un tratamiento efectivo contra el cáncer y ahora busca retomar estas iniciativas como presidente de Estados Unidos.

Biden estudió Historia y Ciencias Políticas en la Universidad Delaware, Derecho en la Universidad de Siracusa y durante su carrera como senador se especializó en materia de salud pública, crimen organizado, tráfico de drogas y defensa de los derechos humanos y promulgó la “Ley Biden Contra el Crimen”, siendo así uno de los senadores que más ha sido reelegido durante su carrera.

Al inicio de la campaña electoral, las encuestas recabadas por Real Clear Politics ponían a Trump al frente para amortiguar la crisis económica, sin embargo, el resto de las encuestas favorecen a Biden para que sea el quien gestione la sanidad y combata a la COVID-19, además de brindar respuestas a temas raciales, migratorios y salud pública.

Joe Biden de 77 años de edad es el favorito de los estadounidenses, la reciente encuesta del Instituto de Estudios Gubernamentales de UC Berkeley arrojó que el candidato demócrata tiene un apoyo más diverso y ha generado más empatía, proyectando honestidad, fiabilidad y un mejor temperamento para lidiar con la presidencia.