Durante la transición del semáforo de riesgo de rojo a naranja, se llevará a cabo la reapertura del Centro Histórico, en la que los negocios abrirán de forma alternada para evitar aglomeraciones.
El Gobierno de la Ciudad informó que a partir del martes 30 de junio serán retirados los policías que impedían el paso al andador de Madero y a la calle de Corregidora.
Dunia Ludlow, directora de la Autoridad del Centro Histórico, informó que las vallas que impedían el acceso al zócalo capitalino también serán retiradas.
Para la reactivación del comercio en la calle de Madero se llegó a un acuerdo en que el martes se abrirán los locales de la banqueta norte, con numeración par y por el miércoles los de la acera sur con nomenclatura impar para ser alternados cada día.
Además, la zona oriente del Centro se dividirá en tres secciones: la norte, la cual se divide de Eje 1 norte a San Ildefonso y de República de Argentina a Eje 1 Oriente y trabajará los días jueves y sábado; la zona centro se dividirá de San Ildefonso a Venustiano Carranza con República de Argentina a Eje 1 Oriente y laborará los martes y viernes, dentro de esta zona entra la calle de Madero; y la zona Sur la cual limita de Venustiano Carranza a Nezahualcóyotl, de Pino Suárez a Eje 1 Oriente y trabajará los días lunes y miércoles.
Para la reapertura los comerciantes tendrán que cumplir con ciertas condiciones como instalarse con rejilla en espacios de más de 1.20 x 2 metros y una sola persona podrá atender el negocio y deberá contar con cubrebocas, carta y guantes, aparte de proporcionar gel antibacterial.
También se manejará un horario de 11:00 a 17:00 horas y los domingos permanecerán cerrados.
Por su parte, Andrés Lajous, Secretario de Movilidad, detalló que algunas calles del centro histórico serán modificadas para solo uso de peatones y para que se mantenga una sana distancia en el caso de visitar algún local que requiera hacer fila.
“El 80 por ciento de los visitantes llega en transporte público, por lo que será aprovechado el espacio público para ofrecer más superficie peatonal con el objetivo de garantizar la sana distancia”, explicó Lajous.
Las calles que mantendrán su operación habitual son: San Jerónimo, 20 de Noviembre, Pino Suárez, Bolívar, Ignacio Allende, Isabel La Católica, República de Chile, República de El Salvador, Belisario Dominguez, Eje 1 Oriente Eje Central, Izazaga, San Pabloa, Callejón del 57 Plaza de la Constitución, Donceles, y República de Cuba.
Las calles que serán de uso peatonal son: Corregidora, Emiliano Zapata, Moneda República de Guatemala, República de Colombia, República de Bolivia Mesones, Ramón Corona, Nacional, Manuel Doblado, 16 de Septiembre, Gante, filomeno Mata, Palma, Aldaco, Meave, San Jerónimo, Regina, Misioneros, Callejón Mixcalco, San Marcos, Leona Vicario, Rodríguez Puebla, girón, República de Argentina, Academia, Las Cruces, Roldán, Santo Tomás, Licenciado Verdad, Torres Quintero y Plaza Torres Wuintero.
Las calles flexibles, las cuales ocuparán uno de los carriles que se utiliza para la circulación de vehículos para ampliar el espacio peatonal serán: República de Uruguay, Tacuba, 5 de Mayo, 5 de Febrero, Jesús María, Palma, Correo Mayor, Del Carmen, San Antonio, tomatlán, San Ildefonso, Venustiano Carranza, Manzanares, Loreto, Mesones, Vizcaínas, República de Perú, república de Brasil y Monte de Piedad.
Rosa Isela Rodríguez, Secretaria de Gobierno, remarcó que en el Centro Histórico se ubican alrededor de 27 mil negocios, con un flujo de dos millones de personas al día antes del inicio de la pandemia de COVID-19.
