Andrés Manuel López Obrador anunció que, con miras a la “nueva normalidad”, prepara un índice, alternativo al del producto interno bruto (PIB), para medir el bienestar, la felicidad y la desigualdad social en México.

En su conferencia el Presidente explicó que ya trabaja en la fórmula de este nuevo parámetro, el cual será desarrollado y aprobado en conjunto con los especialistas que convocará.

“Va a medir, sí, crecimiento, pero también bienestar, grados de desigualdad social; se va a aceptar si hay crecimiento y hay menos desigualdad… y otro ingrediente en este nuevo parámetro: la felicidad del pueblo”, dijo.

El mandatario federal recordó que hay países donde ya se mide la felicidad como parte del bienestar, por lo que es necesario hacer para México un sistema propio que ayude a distribuir la riqueza y el progreso.

Incluso, dijo, con esta nueva medida se puede hacer una aportación al mundo para que se conozca si en los países hay verdadero bienestar. Según López Obrador, el crecimiento económico no sirve si no va acompañado de igualdad y democracia.

Al respecto, el director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, José Luis de la Cruz, aclaró que el PIB no mide el bienestar ni la distribución de la riqueza, pero es fundamental para las políticas públicas, pues el propio gobierno calcula sus ingresos en función a su crecimiento.

La directora de análisis económico y financiero de Banco Base, Gabriela Siller, explicó que el PIB puede desagregarse en consumo privado, inversión fija bruta, gasto de gobierno y exportaciones netas, indicadores que dan una idea de dónde se da el desarrollo económico.

El presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos, Gabriel Casillas, indicó que la medición el PIB es objetiva y estandarizada en el mundo, lo cual permite hacer comparaciones entre naciones.

QUÉ ES PRODUCTO INTERNO BRUTO

El producto interno bruto (PIB) es el valor monetario de los bienes y servicios finales producidos en un país en un periodo determinado. El indicador refleja el valor de esa producción, no condiciones de bienestar, pero es el más útil para cuantificar resultado de políticas públicas, al reflejar el crecimiento de la producción de una nación.