Raucell es un niño valiente, por años sufrió golpes hasta que decidió huir del maltrato y buscar ayuda a su manera.

Parece de entre 10 y 12 años y tiene 17, padece espectro autista y vivía con su mamá y padrastro en diferentes sectores.

Al niño lo identifican vecinos de Golondrinas, Las Quintas y la Yucatán como el Brayan o Migraña, se sabía de su enfermedad y era víctima de violencia familiar pero no hay registro de denuncia.

Hasta el jueves por la tarde que el niño después de una golpiza severa salió de su casa para no volver y se sentó afuera de una tienda de abarrotes en la calle 13 y avenida uno, como para esperar la ayuda.

Y el apoyo llegó de inmediato gracias a reporte de vecinos: elementos de la Policía Estatal de Seguridad Pública rescataron al niño de la calle para darle alimento y trasladarlo a un hospital de Guaymas con apoyo de la Policía Municipal.

En el área de urgencias médicas le hicieron estudios y el resultado fue estremecedor: presenta fractura en el pómulo, derrame ocular, lesiones antiguas en diferentes partes del cuerpo, cicatrices desnutrición severa y deshidratación.

El certificado médico arroja que al niño no le daban alimento ni agua, ni se aseaba, además era víctima de violencia constante y no recibe tratamiento para su padecimiento de espectro autista.

Gracias al reporte ciudadano y a la intervención de las autoridades, Raucell o Brayan recibió atención médica y estará en el hospital hasta estabilizarlo.

Luego será canalizado a un hogar temporal porque el caso fue turnado a la Sub Procuraduría de la Defensa de la Niña, el Niño y Adolescentes, donde abrirán expediente para deslindar responsabilidades.

De ser presentada denuncia por maltrato infantil ante la fiscalía, se pudiera emitir una medida cautelar para alejar a padres hasta conocer origen de violencia.
Por lo pronto, el pequeño valiente logró salir del infierno de golpes que vivió en silencio y ahora tiene una oportunidad para recibir la atención y cuidados que le fue negado en su hogar.