A sólo unos días de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se reúna con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, el expresidente norteamericano Donald Trump insistió en que AMLO es su “amigo socialista”, pues su gobierno le ofreció enviar a más soldados a la frontera para acabar la migración indocumentada.

El pasado sábado, Trump formó parte de un mitin en Anchorage, Alaska, donde hizo campaña favoreciendo a la exgobernadora de Alaska, Sarah Palin, contendiente por el único escaño en la Cámara Federal de Representantes de Alaska.

Durante su discurso, el exmandatario estadounidense repitió que en su administración, “México nos dio 28 mil soldados gratis. ¿Saben por qué nos dieron los soldados? Porque les dije: ‘si no lo hacen, aplicaremos aranceles a todo producto mexicano que ingrese a Estados Unidos’. Me dijeron ‘señor presidente, nos encantaría darle 28 mil soldados, nos encantaría”.

“Socialista, pero un buen tipo”

De acuerdo con Trump, el gobierno mexicano le preguntó: “¿Quiere más? Porque con gusto podemos darle más'”. Sin embargo, el republicano dijo haber respondido “que no, porque no tendría dónde ponerlos”.

Como ha dicho en el pasado, Trump se refirió a López Obrador como “un gran tipo, es socialista, pero un buen tipo (…) y juntos establecimos récords nunca vistos, nuestra frontera era la más segura en la historia reciente de EU”, afirmó el republicano.

En enero de 2021, siendo aún presidente, Trump calificó a López Obrador de “gran presidente de México, un gran caballero y amigo mío“.

El mandatario mexicano también ha calificado a Trump como su amigo.

AMLO en Washington

Este lunes, López Obrador viaja a Washington para reunirse con Biden. Será su primer encuentro después de que el mexicano rechazara asistir, en junio, a la Cumbre de las Américas, molesto por la decisión estadounidense de excluir a Cuba, Nicaragua y Venezuela del evento. En su lugar asistió el canciller Marcelo Ebrard.

El jefe de Estado mexicano señaló que el tema central del encuentro será la migración. El encuentro se da semanas después de la tragedia de San Antonio, Texas, cuando perdieron la vida 53 migrantes, 22 de ellos mexicanos, que fueron abandonados en un tráiler. La mayoría de los migrantes murieron asfixiados, pues no tenían agua, aire acondicionado o ventilación. Otros perdieron la vida en el hospital por causas relacionadas.