La localidad de Uvalde (Texas) aún se encuentra conmocionada después de la masacre en la escuela primaria que terminó con al menos 21 personas muertas, entre ellas 19 estudiantes y dos adultos.

En medio de la polémica, se reabre el debate sobre el control de armas en EEUU. Por un lado, el presidente Joe Biden, junto a varios líderes demócratas han sido claros al cuestionar cuándo se van a enfrentar al lobby de las armas, con gran poder en el país.

En el lado opuesto, los republicanos apuestan por no tocar un derecho. Así se ha expresado el senador texano Ted Cruz que ha defendido que “restringir un derecho constitucional, no funciona”.

La polémica ha reabierto un segundo debate sobre si se debe armar a los profesores para proteger las aulas. Una de las voces que se ha pronunciado al respecto ha sido la del fiscal general de Texas Ken Paxton que ha propuesto que se capacite a los maestros.

“Debería haber un programa en Texas que permita a los maestros, a los distritos escolares, estar capacitar para ayudar a defender la escuela también”, ha dicho Paxton en una entrevista telefónica para la cadena Fox.

Según su justificación, en caso de ataques, la policía no llega a tiempo a salvar vidas y eso solo se conseguiría con un policía en cada campus, lo que sería muy difícil y económicamente complejo, tal y como recoge The Independent.

Además, también ha propuesto poner control de acceso en las escuelas así como armar también “potencialmente a otros administradores” de las escuelas.

En su lógica, como la de los miembros de la Asociación Nacional del Rifle, es más importante tener ciudadanos responsables ante la ley armados y capacitados que restringir el acceso a las armas.

Los datos en EEUU

Mientras las autoridades debaten qué hacer con las armas los datos hablan por sí solos. Las víctimas de tiroteos en colegios en Estados Unidos aumentaron especialmente a partir de 2017, siendo 2021 el año con más personas heridas y fallecidas.

Respecto a la venta de las armas se ha triplicado en las últimas dos décadas con un gran repunte durante la pandemia. En el país, cada año la industria armamentística genera más de 50,000 millones de euros.