CULIACÁN.- Quienes decidirán sobre el futuro de la planta de amoniaco que la empresa GPO pretende construir en Topolobampo, será la propia población de Ahome y lo harán a través de una consulta en la que se preguntará si está de acuerdo o no en que continúe el proyecto, aseguró el gobernador Rubén Rocha Moya.

Acompañado por el secretario de Economía, Javier Gaxiola Coppel, el Gobernador hizo un llamado a la población del municipio de Ahome para que vote el próximo domingo 28 de noviembre, a favor o en contra.

El proyecto contempla una inversión de 5 mil millones de dólares, cuyas obras generarán alrededor de 2 mil 400 empleos en su construcción y 20 mil empleos directos e indirectos durante su operación.

“Yo no tengo por qué decirles a los sinaloenses de esa zona por qué voten, lo que quiero decirles nada más: háganlo, den su opinión a favor o en contra, necesitamos saber si se puede o no se puede y ya no estar esperando”, expresó Rocha Moya.

Consideró que la inversión es muy importante, y que se parte de la idea que no tiene un riesgo, ya que existe un estudio de Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).

Comentó que este tema se abordó el pasado viernes durante su participación en el Foro Mar de Cortés, celebrado en San José del Cabo, pues se trata precisamente de una oportunidad de inversión para los cinco estados que colindan con este litoral: Sinaloa, Sonora, Nayarit y las dos Baja California.

Indicó que en ese marco se explicó que aunque Sinaloa está en primer lugar de competitividad en el noroeste, no tiene inversión extranjera.

“Nosotros necesitamos cuidar, llamar la inversión extranjera, pero cuidarla también”, apuntó.
En el caso de esta planta de amoniaco se trata de una inversión alemana que está parada desde hace 12 años.

“Cuál es el problema, que los gobiernos no lo orientaron a ese grupo de manera positiva y empezaron a trabajar y dejaron de atender una serie de requisitos que demanda la instalación de una planta de esta naturaleza”, lamentó.

Refirió que la omisión en la atención de las comunidades indígenas, a quienes se les debió invitar a participar en una consulta como lo marca la ley, generó que estos grupos sociales se ampararan y el proyecto se encuentra frenado.

“Cómo les podemos decir a los inversionistas: vengan, en primer lugar a los alemanes, si tienen 12 años ahí y no se puede echar a andar la planta”, precisó.

De continuar el proyecto, el acuerdo que se tiene con GPO es que la generación de los 2 mil 400 empleos para la construcción de la planta sea mano de obra local, y una vez que entre en operaciones podrá generar entre 14 mil y 20 mil empleos directos e indirectos a través de los proveedores, que también serán empresas de la región.

Por su parte, el secretario de Economía, Javier Gaxiola Coppel, señaló que de concretarse la planta, será de mucho beneficio para el productor agrícola sinaloense al tener aquí mismo los insumos de fertilizantes, como el amoniaco y la urea, pero también beneficiará al productor sonorense y del resto del país, quienes aprovecharán la producción que se tendría en el estado de dichos insumos que actualmente se importan.