El gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, afirmó que casi 9 de cada 10 delitos que se cometen en la entidad están relacionados con una adicción, pero no hay información pública que sustente este dato.

Especialistas consultadas por Animal Político confirmaron que falta información a nivel nacional para establecer tal relación, que el dicho necesita precisiones y que una declaración así puede resultar estigmatizante.

“El 87% de los delitos están relacionados con una adicción, obviamente tenemos que trabajar el tema. Junto con lo social, la parte de las adicciones, sumarnos al programa nacional de adicciones y hacer nuestra propia tarea a nivel estatal”, dijo el gobernador en conferencia de prensa el 12 de noviembre.

Diapositiva presentada por el gobernador Alfonso Durazo durante la conferencia de prensa del 12 de noviembre.

 

Animal Político contactó con el área de comunicación del gobierno de Sonora para solicitar la fuente o la metodología que llevaron a este señalamiento, así como a qué drogas se refiere en específico, pero hasta el momento no ha obtenido respuesta.

Las bases de datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), que reportan la incidencia delictiva en el país, no incluyen información sobre delitos “relacionados” con el uso, abuso o dependencia de drogas.

En cambio, sí se muestra el número de carpetas de investigación abiertas por el delito de narcomenudeo del fuero común en Sonora, que ascienden a 2,287 de enero a septiembre de 2021 y representan apenas el 8.07% del total de presuntos delitos en el estado (28,308).

El Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) tampoco cuenta con un registro que incluya la relación entre el consumo de drogas y los delitos. Esto fue confirmado por personal del instituto.

Lo que se puede conocer a partir de su Censo Nacional de Impartición de Justicia Estatal 2021 es que de los 9,284 delitos registrados en las causas penales ingresadas en primera instancia en Sonora durante 2020, el 27,59% (2,562) corresponde a delitos contra la salud por narcóticos.

En el mismo sentido, el Inegi reportó en un comunicado que en 2018, a nivel nacional, se registraron 1,935,451 delitos del fuero común en averiguaciones previas y carpetas de investigación iniciadas, de los cuales 3.9% corresponden a delitos de narcomenudeo.

“¿Cómo podríamos saber que el 87% de los delitos que se cometen tienen un problema de adicción? Francamente no hay información para saberlo. De entrada no sabemos cuántas personas usan sustancias en el país”, señala Catalina Pérez Correa, académica e integrante del Programa de Política de Drogas del CIDE.

Además, comenta la especialista, “sabemos que hay una impunidad altísima en el país, de más de 95% en algunos estados. Cómo vamos a saber cuáles son las circunstancias en las cuales se cometen esos delitos si no sabemos ni siquiera quién está cometiendo porque no se investigan los delitos, no se denuncian”.

“No tenemos información sobre esas personas, ni tenemos información sobre los delitos. Si alguien quiere hacer ese tipo de declaración tendría que decir sobre qué delitos se está hablando, de dónde saca esa información y qué sabemos de las personas que están cometiendo esos delitos”, afirma Zara Snapp, directora del Instituto RIA.

Tampoco basados en las cifras oficiales sobre delitos “podemos asumir que cualquier persona que posee una sustancia tiene una adicción y para nada se puede vincular directamente a la violencia”, critica.

La Secretaría de Salud, a través de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), cuenta con la Encuesta Nacional de Adicciones, que no incluye la cifra reportada por el gobernador de Sonora.

Lo que sí se muestra en el Informe sobre la Situación del Consumo de Drogas en México, publicado en 2019 por el organismo, es que, de acuerdo con datos del gobierno, el 12.5% de adolescentes que cometieron un delito lo hicieron bajo el influjo de una droga.

Como funcionaria de la Conadic, Berenice Santamaría González declaró en 2013 que el 60% de los delitos estaban relacionados con adicciones, de acuerdo con un reporte de prensa.

Santamaría González replicó este dato en una presentación disponible en el portal de la Organización de Estados Americanos (OEA), con fecha del 2011, que cita como fuente un informe de 2009 del Instituto Ciudadano de Estudios sobre la Inseguridad (ICESI), al que no fue posible acceder porque la página web de dicho instituto no está funcionando.

Animal Político buscó a la Conadic, pero hasta el momento no ha podido establecer contacto.

El Programa Estatal de Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia 2016 – 2021 elaborado por la propia Secretaría de Seguridad Pública de Sonora durante el gobierno pasado, señaló que “la relación entre el consumo de drogas y la violencia es compleja”, aunque estudios “describen que no existe una relación causal entre ambas”.

Así, aunque existe información pública generada por el gobierno sobre delincuencia y el uso de drogas en México, ninguna establece la relación tal como la reportó Durazo.

A nivel internacional, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) señala que solo el 37% de los homicidios se realizaron bajo la influencia de alguna sustancia.

De ese 37%, el 90% lo hizo bajo efectos del alcohol, una droga legal, como puede verse en la gráfica.

Discurso estigmatizante

Las especialistas consultadas por Animal Político señalaron que a la frase de Durazo le hace falta explicar si se refiere a que la persona que cometió el delito estaba drogada durante el momento, que el motivo del acto estuviera relacionado el mercado de la sustancia, o que se haya cometido con el fin de adquirirlas.

En este sentido descartaron la existencia de una relación como la mostró el exsecretario de Seguridad del gobierno mexicano, y dijeron que su frase puede resultar estigmatizante.

“De la presentación no conocemos a qué se refieren con ‘delitos están relacionados con una adicción’, esto puede tener muchas interpretaciones”, comenta Felipe Sánchez, director de Investigación y Políticas Públicas de México Unido Contra la Delincuencia.

“La información disponible no permite conocer si el delito estaba relacionado con una adicción, la información que se registra a mayor detalle es la del Inegi […]. Esta información no es adecuada para determinar una relación”, añade.
“Sin duda esto puede estigmatizar a las personas usuarias. Sigue reproduciendo un discurso de que las personas usuarias son personas violentas, cuando no hay ningún dato que sustente esto”, comenta Snapp.

“El uso de alcohol sí está vinculado a actos violentos, a violencia intrafamiliar, eso sí se puede hacer y hay muchos estudios que lo sustentan, pero en el caso de las sustancias ilegales no existe esa correlación y sin duda esto es otro modo, como esta campaña del gobierno federal, en estigmatizar a las personas usuarias utilizando el miedo”, añade.

“Este gobierno ha hecho una política de criminalización de las personas usuarias de drogas. Las campañas que han hecho sobre sobre el uso de sustancias son muy criminalizantes y siempre han ligado el uso de drogas con distintos problemas sociales, incluida la delincuencia”, concluye Pérez Correa.

FUENTE: Animal Político