A partir de este miércoles y durante los primeros 10 días del gobierno del presidente Joe Biden se emitirán distintos decretos, así como iniciativas legislativas sobre ayudas para la pandemia, migración y cambio climático, que empezarán a analizarse en el Congreso.

La máxima prioridad de Biden es que el Congreso apruebe el plan de 1.900 millones de dólares para administrar 100 millones de vacunas en los primeros 100 días de su gobierno, además de enviar pagos directos de mil 400 dólares a los estadounidenses para estimular una economía devastada por el virus. Eso no es fácil, aunque a todo el mundo le guste recibir dinero del gobierno.

Biden prometió dedicar el primer día de su mandato a extender el aplazamiento en los pagos de préstamos estudiantiles, iniciar el proceso para que Estados Unidos vuelva a sumarse a la Organización Mundial de la Salud y al Acuerdo Climático de París y pedir a los estadounidenses que se comprometan a llevar cubrebocas durante 100 días.

Tiene previsto recurrir a decretos presidenciales para revocar el veto del gobierno de Trump a los migrantes de varios países de mayoría musulmana y eliminar las exenciones a los impuestos corporativos cuando sea posible, además de multiplicar por dos los impuestos que pagan las empresas estadounidenses sobre sus beneficios en el extranjero.

Este mismo miércoles creará equipos de trabajo para abordar la situación de las personas sin hogar y para reunir a padres migrantes con niños de los que fueron separados en la frontera entre México y Estados Unidos.

Tiene previsto enviar propuestas de ley al Congreso para exigir revisiones de antecedentes más exhaustivas para los compradores de armas, eliminar las exenciones de responsabilidad civil para los fabricantes de armas y abrir una vía a la ciudadanía para los 11 millones de inmigrantes que llegaron al país de forma ilegal cuando eran niños.

El nuevo presidente quiere relajar de forma inmediata los límites a que los trabajadores federales se sindiquen, revocar los esfuerzos de Trump de retirar 100 normas medioambientales y de salud pública introducidas durante los mandatos de Obama y crear normas para limitar la influencia corporativa sobre su gobierno y garantizar la independencia del Departamento de Justicia.

Entre otras iniciativas urgentes están volver a unirse al acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán, un paquete climático de 2 billones de dólares para que Estados Unidos alcance emisiones neutras de dióxido de carbono para 2050, un plan para gastar 700 mil millones de dólares en impulsar la manofactura y la investigación y desarrollo, y un proyecto para incluir una “opción pública” en la ley sanitaria del gobierno de Obama.