Los hospitales del condado de Los Ángeles han llegado a un punto crítico y las autoridades médicas aconsejan a los equipos de ambulancia que reduzcan el uso de oxígeno y que no lleven a los hospitales a pacientes sin apenas posibilidades de supervivenciainforma Los Angeles Times.

Las autoridades de salud subrayan que los médicos deben centrarse en los pacientes con mayor probabilidad de sobrevivir. “Muchos hospitales han llegado a un punto de crisis y tienen que tomar decisiones muy difíciles sobre la atención al paciente”, reconoció este lunes la directora de servicios de salud del condado de Los Ángeles, Christina Ghaly, durante una sesión informativa.

La Agencia de Servicios Médicos de Emergencia del condado de Los Ángeles emitió este lunes una directiva para los equipos de ambulancias, instándoles a administrar oxígeno embotellado solo a pacientes cuyos niveles de saturación de oxígeno caen por debajo del 90 %. Asimismo, se les ha dicho a los equipos paramédicos que no transfieran a pacientes que experimentan un paro cardíaco a menos que se pueda restablecer la circulación espontánea en la escena, para no sobrepasar la capacidad de los hospitales.

Según los médicos, estas medidas se toman ante la perspectiva de que las circunstancias empeoren en las próximas semanas, cuando los pacientes enfermos durante las vacaciones de Navidad requieran tratamiento. De esta forma, los funcionarios de salud intentan buscar formas para aumentar la capacidad de hospitales para tratar a personas contagiadas.

“El volumen que se ve en nuestros hospitales todavía representa los casos que resultaron de las vacaciones del Día de Acción de Gracias”, destaca Ghaly. “No creemos que todavía estemos viendo los casos que surgieron de las vacaciones de Navidad. Esto, lamentablemente, y los casos de las recientes vacaciones de Año Nuevo, todavía están ante nosotros, y los hospitales de toda la región están haciendo todo lo posible para prepararse”, añadió.

Mientras tanto, el gobernador del estado de California, Gavin Newsom, dijo que el estado busca la forma de aumentar el suministro de oxígeno para su uso en el tratamiento de pacientes con covid-19.