México ocupa el segundo lugar a nivel mundial en turismo sexual infantil, siendo superado solo por Tailandia. Es por eso que desde el Senado de la República se piden acciones contundentes contra este crimen.

En Zacatecas se llevó a cabo el foro “Pornografía infantil y turismo sexual infantil en México: una triste realidad” y contó con la presencia de representantes de los tres Poderes del Estado, las cámaras empresariales y la sociedad civil.

El objetivo de la reunión fue llamar la atención a la problemática del turismo sexual infantil en México y la violencia sexual en nuestrp país.

De acuerdo con un comunicado del Senado de la República, en México, cinco millones de niñas y niños son víctimas de violencia sexual. Debido a la pandemia, se incrementó hasta 73 por ciento.

Las víctimas de pornografía y turismo sexual infantil oscilan entre los cero meses y los 18 años de edad.

Acapulco, principal destino de turismo sexual infantil

Een 2018, 20 mil menores de edad cayeron en las manos de las redes de trata, problemática que se encuentra profundizada en los destinos turísticos de Cancún, Acapulco, Puerto Vallarta, Los Cabos y la Ciudad de México.

Es precisamente Acapulco la ciudad con mayor afluencia de turismo sexual en nuestro país. Pederastas extranjeros, particularmente de Estados Unidos y Canadá visitan el puerto para cumplir sus fantasías sexuales y generar pornografía infantil. Posteriormente regresan a su país para comercializar el material.

Es por eso que desde el Senado se ha instado a los Congresos locales trabajen en mejorar sus Códigos Penales para proteger los derechos de la niñez y proveer herramientas para combatir estos delitos.

De acuerdo con el informe del Senado, en México se generan 34 mil millones de pesos anuales por pornografía infantil. Según datos del Departamento de Seguridad de Estados Unidos, el país ocupa el primer lugar a nivel mundial en difusión de este tipo de pornografía.

Castigos y penas inadecuadas

En México 1 de cada 10 delitos relacionados con pornografía infantil fueron denunciados. Sin embargo, sólo se inició un proceso judicial en apenas el 60 por ciento de los casos.

Además, en México un presunto responsable de violencia sexual infantil puede estar libre hasta 3 años después de haber cometido el crimen. Y, como bien sabemos, las víctimas pueden tardar años en el proceso de la búsqueda de justicia.