Los aficionados del béisbol recuperan su deporte luego de la suspensión de actividades de las ligas por la pandemia de Covid-19. En México, desde enero no se juega béisbol profesional, cuando finalizó la Liga Mexicana del Pacífico (LMP).

En marzo MLB canceló su Spring Training y la México Series de la Ciudad de México y la Liga Mexicana de Béisbol suspendió su pretemporada e inicio de campaña y la canceló definitivamente este mes. Pero las Grandes Ligas comenzarán su temporada el jueves 23 de julio y la LMP ya confirmó su campaña 2020-21, con algunos ajustes, para octubre.

El primero de ellos es el calendario, que si bien de momento no ha modificado sus 68 juegos habituales por club, sí se está revisando para minimizar viajes aéreos de los equipos y mitigar los riesgos de contagio por Covid-19. Otro cambio será la asistencia, ya que por las medidas sanitarias se prevén aforos de los estadios a la mitad o por debajo, siempre y cuando las autoridades de salud en los estados de Baja California, Sonora, Sinaloa, Jalisco y Nuevo León, entidades que albergan los 10 equipos de la LMP, lo permitan.

“Estamos trabajando escenarios donde un porcentaje de ocupación en los estadios y en función del tipo semáforo que tenga el estado podamos utilizar un porcentaje de ocupación”, explicó el presidente de la liga, Omar Canizales Soto.

El rango de asistencia previsto está entre el 30 y 50% y, con base en registros de la temporada anterior, oscilaría entre 951,000 y 1.58 millones de personas en temporada regular. En promedio la liga tuvo una asistencia de 9,521 aficionados por juego entre octubre y diciembre de 2019, y ahora quedaría entre los 2,856 y 4,760 si las condiciones previstas hasta ahora se mantienen.

“Entre los contratos multianuales que ya teníamos firmados, los derechos de televisión que tenemos con Sky más los patrocinios regionales que cada equipo consigue es la búsqueda de encontrar un punto de equilibrio en el resultado de la temporada; sabemos que esta temporada no va a ser rentable, vamos a perder dinero, pero lo que estamos procurando es perder la menor cantidad posible y, si es posible, encontrar un punto de equilibrio, con eso nos damos por bien servidos”, reconoció Canizales Soto.

En lo comercial, aunque la mayoría se mantiene con el circuito, algunos no estarían presentes esta temporada debido al impacto económico de la pandemia, por lo que la liga busca más socios comerciales. La campaña 2019-20, la liga, por sí sola, tuvo 11 patrocinadores.

“Estamos en comunicación para sumar patrocinadores, poder visualizar las marcas y tener interacción a través de la televisión, es una buena oportunidad y aunque entendemos que algunos patrocinadores quisieran gente en los estadios y en la medida en que sea posible sí lo haremos, porque esa es nuestra intención, es en función de los semáforos de cada estado”, agregó el presidente.

Los contratos de los jugadores también serán impactados dada las condiciones económicas, la cantidad de extranjeros se redujo de seis a tres esta campaña en parte por el tipo cambio entre el peso y el dólar y, debido a la inactividad de jugadores en las ligas menores de Estados Unidos y la menor carga física en MLB, se abre la opción de que beisbolistas mexicanos puedan reportar a LMP y los que suelen hacerlo podrán llegar con más anticipación.

El protocolo de salud para jugadores y cuerpos técnicos de los equipos aún en desarrollo y les pedirán evitar contacto con personas en riesgo de Covid y se mantengan aislados y monitoreados por dos semanas antes de reportar a los entrenamientos en septiembre, donde serán observados a diario y deberán cambiar hábitos en las instalaciones para aumentar la seguridad sanitaria. También trabajan el protocolo para los fans.

Todo por una campaña “en las mejores condiciones posibles; es poner todo lo que esté en nuestras manos para llevar a cabo la temporada y nos vamos a ajustar a las necesidades que se nos vayan presentando”, expuso Canizales.