El gobierno de Estados Unidos extendió hoy el cierre de la frontera con México hasta el 22 de junio para el tráfico no esencial, a fin de evitar la expansión de contagios de Covid-19.

Por la mañana, Canadá y Estados Unidos llegaron a un acuerdo para mantener cerrada su frontera a todo tráfico considerado no esencial al menos hasta el próximo 21 de junio, según anunció el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) dio a conocer un documento en el que anuncia su decisión de “seguir limitando temporalmente el viaje de individuos de México a Estados Unidos en los puntos de entrada en la frontera” entre ambos países. Sólo se permitirán, como ya se había establecido cuando se restringió el pasó la primera vez, el 24 de marzo pasado, los “viajes esenciales”.

El documento alude a las circunstancias descritas ya durante el anuncio de marzo como justificación para cerrar: que el riesgo de contagio y expansión de Covid-19 entre México y Estados Unidos representa “una amenaza específica a la vida humana o los intereses nacionales”.

La medida no afecta y no debe interrumpir, subraya el DHS, el “comercio legítimo entre las dos naciones, o interrumpir las cadenas de suministro que son críticas para garantizar que la comida, combustible, medicina y otros materiales críticos lleguen a las personas a ambos lados de la frontera”.

Se consideran viajes “esenciales”, entre otros: el regreso de ciudadanos estadounidenses y residentes legales a Estados Unidos; los de individuos que se trasladan con propósitos médicos; los de quienes asisten a instituciones educativas; los de aquellos que se trasladan a trabajar a Estados Unidos (como trabajadores agrícolas); los que se trasladan por razones derivadas de la respuesta a la emergencia y la atención médica (como funcionarios de gobierno o quienes están atendiendo la emergencia); los de personas que están en el sector de comercio transfronterizo (como conductores de camiones que trasladan carga entre Estados Unidos y México); los realizados por razones gubernamentales o diplomáticas; los de miembros de las Fuerzas Armadas estadounidenses, y sus parejas e hijos; los relacionados con motivos militares u operaciones del ejército.

Además, Estados Unidos anunció que, por la emergencia del Covid-19, prolongará, con carácter de indefinido, las deportaciones exprés. La orden se mantendrá vigente hasta que los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) consideren que el peligro de que esos extranjeros introduzcan el Covid-19 a Estados Unidos ha dejado de representar “un peligro serio a la salud pública” de los estadounidenses.