Dos padres que fueron separados de sus hijos en la frontera de Estados Unidos están demandando al gobierno por 12 millones de dólares, argumentando que sus hijos sufrieron abusos en hogares de acogida de este país.

La demanda presentada este viernes en la Corte del Distrito de Arizona señala que la política de “tolerancia cero” de la administración Trump fue “cruel e inconstitucional”, que destrozó a sus familias y que sus hijos todavía están sufriendo las consecuencias más de un año después de que fueran reunificados.

Los padres también aseguran en la demanda que sus hijos fueron abusados por otros menores mientras estaban bajo custodia del gobierno.

En un comunicado, emitido por el Southern Poverty Law Center, uno de los padres describió el dolor que según afirma él y su familia sufrieron.

“Me lo quitaron y no tenía ni idea de lo que le estaba pasando. Cuando me enteré de que otros chicos lo abusaron, me enfermó el dolor”, relató el padre, identificado por sus iniciales A.P.F. en la demanda. “Nadie merece esta crueldad”, añadió.

Según un comunicado de los abogados, los padres pasaron semanas sin saber el paradero de sus hijos y aseguraron sentirse “aterrorizados” por imaginar que nunca volverían a verlos.

Además, indica la denuncia, los padres fueron presionados por autoridades migratorias para abandonar su derecho a solicitar asilo.

“Nunca soñé que Estados Unidos nos trataría a mi hijo y a mí de esta manera, vinimos buscando seguridad y nos enjaularon como animales”, dijo uno de los padres demandantes que prefirió ser identificado con las iniciales A.P.F.

“Nadie respondió a mis llamadas de ayuda cuando mi hijo se enfermó cada vez más, luego me lo quitaron y no tenía idea de lo que le estaba pasando, nadie merece esta crueldad “, agregó.

El otro padre demandante, identificado con las iniciales J.V.S., señaló que, durante más de 10 semanas, fue separado de su hija de 5 años, a quien se nombra con las letras H.Y.

“Fue el peor día de mi vida cuando me quitaron a mi hija, me obligaron a mirar mientras los funcionarios del Gobierno la alineaban con otros niños que fueron separados de sus padres en la ‘hielera’ sin saber si alguna vez la volvería a ver”, dijo.

El padre añadió que mientras su hija estuvo bajo custodia de ORR, fue sometida a diversas formas de abuso.

La “hielera” es una denominación de una instalación de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), llamada así por sus bajas temperaturas.

El Departamento de Salud y Servicios Humanos se negó a comentar sobre las acusaciones de la demanda. Indicó que no hace declaraciones sobre asuntos específicos relacionados con litigios que están en curso. También añadió que la red de instalaciones y programas de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados a lo largo del país está “dedicada al bienestar de los niños” y que los menores bajo el cuidado de la agencia reciben “un ambiente seguro y saludable que garantiza el acceso a alimentos nutritivos, ropa limpia, educación y servicios médicos”.

Fuente: CNN