CIUDAD DE MÉXICO (Proceso). – Al grito de “ole, ole, ole, oleeeeee ¡soy gay! ¡soy gay!, miles de integrantes de la comunidad LGTTTBIQA (Lesbianas, Gays, Travestis, Trans y Transexuales, Bisexuales, Intersex, Queer, Asexuales), conmemoraron la 41 edición del Día Internacional del Orgullo bajo el lema “Ser es resistir”.

Del Ángel de la Independencia al Zócalo el ambiente fue festivo. Desde las 11 de la mañana comenzaron a llegar los contingentes y una hora después la marcha dio inicio. A las 14:00 la gente seguía llegando al Ángel de la Independencia para recorrer la emblemática avenida, cruzar la Alameda y llegar al Zócalo.

Algunos comercios colocaron globos con los colores de la bandera del orgullo gay. Los carros alegóricos que circulaban por un carril de Paseo de la Reforma, bailaban al ritmo de canciones como “I’m too sexy” del grupo británico Right Said Fred o “Únete a la fiesta” del grupo Sentidos Opuestos, mientras lanzaban condones, cintillos de colores o maquillaje. Una escuela de computación ofrecía sus cursos con 50% de descuento para los participantes.

En una pancarta se dirigió un mensaje a las cámaras de Diputados y Senadores para que fueran más tolerantes porque, “una sociedad diversa es una sociedad fuerte”.

La “Red de Familias Trans” se caracterizó porque marcharon las madres con cartulinas donde escribieron: “¡Apoyo al 100% a mi hijo trans!”, “¡Estoy orgullosa de mi hijo trans y de ti! Abrazos de mamá. Gratis”, mientras sus vástagos portaban coronas, sombrillas y utensilios con los colores característicos del movimiento LGTTTIBQA.

Un globo de Américan Express circulo por los aires y en otra pancarta se ofrecía trabajo a la comunidad LGBTTTIBQA.

“¡No necesitas ser la causa para defender la causa! ¡El amor es para todos!”, se leyó en otra pancarta. En una más: “¡Somos la herencia de la resistencia! #PorNuestrasVidasMarchamos”.

La consigna más entonada fue: “¡Más aceptación, menos conversión!”, en alusión a la terapia de conversión para homosexuales, practicada, principalmente por clérigos.

“¡Más tolerancia, menos resistencia!”, gritaron los manifestantes, disfrazados y apoyados por personas que, sin manifestar ninguna preferencia sexual.

Las consignas políticas se diversificaron: “¡Aplaudan, aplaudan, no dejen de aplaudir, que la homofobia se tiene que morir”, gritaron las personas del contingente con las banderas de colores azul, rosa y blanco, que representaron a los transexuales.