Embajadas. El salario se calcula en función de qué tan caro es residir en el país y no necesariamente por su nivel de desarrollo.

El sueldo de los diplomáticos mexicanos no siempre alcanza para cubrir los costos de vida en el extranjero y tiene que calcularse en función de qué tan caro es residir de los países donde se encuentran asignados y no necesariamente a su nivel de desarrollo económico, aseguró la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Luego de que MILENIO diera a conocer que 388 diplomáticos mexicanos perciben salarios por encima del presidente Andrés Manuel López Obrador, la dependencia argumentó en una misiva que el costo de vida en un país puede ser más caro, aun si éste se encuentra en vías de desarrollo.

Asimismo, destacó que las percepciones salariales de la diplomacia mexicana llevan varios años desactualizadas “lo que implica que el costo de vida está hoy en día por encima de lo que los funcionarios de México en el exterior perciben”.

En ese sentido, insistió en que el Servicio Exterior Mexicano se ha ajustado a las medidas de austeridad dictadas por la actual administración.

En su edición del jueves, MILENIO dio a conocer el tabulador del SEM, obtenido vía la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública.

En éste destaca el caso de varios países del primer mundo y otros en vías de desarrollo en donde los embajadores mexicanos perciben salarios que van de los 230 mil hasta 260 mil pesos. Ante esta información, Relaciones Exteriores sentenció que el tabulador vigente se basa en diferentes índices, entre ellos el Mercer —que revisa los costos de vida en un país determinado—, así como el Índice de Pago de la Organización de Naciones Unidas, por lo que consideró que en la remuneración a sus diplomáticos es esencial tomar en cuenta el poder de paridad de compra (PPP por sus siglas en inglés), con el que se mide el costo de vida en un país determinado, es decir, cuánto cuesta un servicio en otro país.

En ese sentido, el director del Servicio Exterior y Recursos Humanos, Moisés Poblanno, explicó que las remuneraciones no solo se calculan conforme al tipo de cambio, sino al poder adquisitivo de los representantes en el exterior.

“La percepción ordinaria total de todos servidores públicos del Servicio Exterior Mexicano, adscritos en embajadas, consulados, misiones y oficinas de enlace de México en el exterior, así como las prestaciones que reciben y se rigen bajo su propia ley, se ajustan a poder de paridad de compra (PPP) del costo de vida en la ciudad en la que residen”, dijo.

Por ello, la dependencia hará la revisión de la estructura salarial de los miembros del Servicio Exterior ante Hacienda considerando no solo el tipo de cambio.

Agregó que esto es debido a la necesidad de “garantizar un poder adquisitivo equivalente en todos los lugares de destino, estabilizando el sueldo mensual en la moneda local” de los países donde residen los diplomáticos mexicanos con sus familias.