El diputado federal de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar, adelantó que en la conformación del Presupuesto 2019 la nueva Cámara de Diputados hará una revisión de los fondos de los Ramos 23 y 33, para evitar “el dispendio, la corrupción y el despilfarro de los gobernadores”.
Dijo que de haber una correcta aplicación de los recursos públicos “ya no serán necesarias las manifestaciones públicas” en la Ciudad de México ni frente a la Cámara de Diputados.
Incluso, el legislador -quien hace 18 años entró montado a caballo hasta el interior del salón de sesiones en reclamo de mayores recursos para el campo- aseguró que “ya no se requerirán caballos para entrar el Palacio Legislativo, porque será un Congreso de puertas abiertas”.
Al acudir a registrarse como diputado, explicó que para ello deberá realizarse una Convención Nacional Hacendaria, donde se discutirán los ajustes del gasto federalizado, a fin de evitar la asignación discrecional de los recursos públicos.
A dicha convención serán convocados diputados locales, federales y senadores para discutir la forma en que se revisará la forma en que son distribuidos los recursos a Estados y municipios.
“Se tiene que evitar el desvío y despilfarro de los recursos públicos”, dijo.
Adelantó que habrá modificaciones en el Presupuesto de Egresos de la Federación para evitar el dispendio en los estados, al advertir que hay 800 mil millones de pesos en los fideicomisos secretos que se pueden usar para el gasto federal, ya que “sólo han servido para ocultar recursos federales que no se gastan y tampoco son devueltos a la Federación”.
Estos recursos son objeto de una “enorme corrupción y dispendio ofensivo”, dijo. Del gasto federalizado para los estados y municipios, que asciende a casi un billón 800 mil millones de pesos, se podrían “rescatar” 250 mil millones de pesos, y de los fideicomisos que aparecen en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), 800 mil millones de pesos, comentó.
“Tenemos claro, sin violentar el pacto federal ni atentar contra la soberanía de los estados y la autonomía, que debe haber una revisión del gasto federalizado, particularmente lo que tiene que ver con el Ramo 23, que es precisamente la fuente de corrupción y enriquecimiento que han desatado algunos gobernadores y presidentes municipales”, comentó.
Otro de los asuntos a revisar y precisar –anotó- es el de los recursos que manejarán los “Coordinadores estatales” que nombrará el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
