Debido a la inseguridad y falta de apoyo institucional, el santuario Ostok anunció, el 20 de mayo de 2025, el cierre definitivo de sus instalaciones en Culiacán de Rosales, Sinaloa, por lo que indicó que comenzaría el traslado de más de 700 animales silvestres -incluidos elefantes y grandes felinos-, al Bioparque El Encanto, ubicado en Mazatlán, en un trayecto terrestre que duraría 2 horas con 48 minutos, en 220.4 kilómetros de distancia.
Durante una conferencia de prensa, Ernesto Zazueta Zazueta, presidente del santuario Ostok, informó que se tomó dicha decisión ante un entorno que calificó como insostenible. Asimismo, entre los principales factores, señaló la falta de personal veterinario, presuntas amenazas y la ausencia de respuesta por parte de autoridades ambientales locales y federales, como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
“El miedo se ha vuelto un factor cotidiano. No conseguimos especialistas dispuestos a entrar a Culiacán ni insumos médicos. Así no se puede operar un santuario”, afirmó Zazueta Zazueta, quien puso como ejemplo a Vireky, una elefante que requería atención urgente, pero no fue atendida debido a la negativa de expertos a trasladarse a la capital sinaloense.
Asimismo, Zazueta Zazueta indicó que entre los animales reubicados se encontraba Big Boy, un elefante rescatado que se convirtió en símbolo del santuario. Además, serían trasladados tigres, leones, jaguares, osos, monos, antílopes y aves. Sin embargo, 14 felinos permanecerían en Ostok, debido a trámites pendientes con la PROFEPA.
Por otra parte, el directivo de Ostok explicó que en Mazatlán se replicaría el modelo de dicho santuario, esta vez con condiciones más favorables para garantizar el bienestar de los animales y que su misión seguiría enfocada en la protección y rehabilitación de fauna silvestre, en un entorno seguro.
Durante su intervención, el entrenador canino sinaloense César Felipe Millán Favela -quien protagonizó varias series de televisión, como la de ‘El encantador de perros’- expresó su respaldo al proyecto y subrayó la importancia de promover el respeto a la naturaleza. “Ayudar a un animal también es ayudar a un ser humano”, enfatizó.
El Santuario Ostok era un espacio de conservación y rescate de fauna silvestre ubicado en Culiacán de Rosales, dedicado al cuidado de animales que habían sido víctimas de tráfico ilegal, abandono o maltrato.
Fundado por el activista Ernesto Zazueta Zazueta, el santuario albergaba a más de 700 ejemplares, incluidos grandes felinos, primates, aves y elefantes. Además, funcionaba como un centro sin fines de lucro, con enfoque en el bienestar animal y la educación ambiental.
El capo Ismael Mario Zambada Garcías, alias “El Mayo”, confirmó, el 10 de agosto de 2024, la versión difundida, un día antes, por Keneth Lee Salazar -entonces titular de la Embajada de México en Estados Unidos, desde el 2 de septiembre de 2021-, de que fue emboscado en Culiacán de Rosales, por Joaquín Guzmán López, “El Güero Moreno”, cuando esperaba reunirse con Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa -desde el 1 de noviembre de 2021- y con Héctor Melesio Cuen Ojeda, político asesinado el día de las detenciones de ambos capos sinaloenses, el jueves 25 de julio del mismo año.
Desde esa fecha, “Los Chapitos”, “Los Menores” y/o “Los Chiquillos” -como se le conoce a Iván Archivaldo Guzmán Salazar, “El Chapito”, y a sus hermanos, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, “El Alfredillo”, así como a Joaquín “El Güero Moreno” y Ovidio Guzmán López, “El Ratón”, todos hijos del capo sinaloense Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, “El Chapo”, estos últimos tres presos en Estados Unidos- sostenían una guerra contra otra facción del Cártel de Sinaloa, la de “Los Mayos”, dirigida por Ismael Zambada Sicairos, alias “Mayito Flaco”, uno de los hijos del cofundador del CDS.
Fuente: Zeta