Esta mañana trascendió que Emilio Lozoya Austin podría arribar al Reclusorio Norte para su correspondiente audiencia de los días 1 y 15 de cada mes. No obstante, por la pandemia de Covid-19, debería presentarse el lunes 3 de agosto, entre las 10:00 y 14:00 horas.

De acuerdo con Noticieros Televisa, como los juzgados se encuentran cerrados por la Covid-19, el exdirector de Pemex deberá acudir al Reclusorio Norte este lunes 3 de agosto para firmar su proceso de libertad condicional.

Así, Emilio Lozoya tendrá que presentarse el 1 y 15 de cada mes para firmar su libertad condicional desde el momento en que abandonó el hospital donde se encontraba para ser atendido por la anemia y síndrome de Barrett (complicación en el esófago) que padece.

Sí firmó

Sin embargo, más tarde se informó que Lozoya Austin firmó el libro de procesados a través de correo electrónico, de acuerdo con información difundida por el sitio de López Doriga Digital.

Lozoya es acusado por los delitos de corrupción en los casos de Odebrecht y Agronitrogenados y este día no se  se presentó a firmar su libertad condicional este primero de agosto, pese a la exigencia de un juez federal.

Realizó su primera comparecencia

El exjefe de Pemex compareció el martes y miércoles a través de videollamada desde el hospital en las audiencias de control sobre el caso Odebrecht y la compraventa irregular de una planta de fertilizantes, casos por los que fue extraditado.

Lozoya Austin está acusado de haber recibido 10,5 millones de dólares en sobornos de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de obras públicas en los estados de Hidalgo, Tamaulipas y Veracruz.

También está acusado de comprar la planta inservible de fertilizantes Agronitrogenados al director de Altos Hornos de México, Alonso Ancira, a cambio de un soborno con el que se compró una lujosa casa en la capital.

¿Por qué Lozoya enfrenta el proceso legal en libertad?

Los jueces de control de ambas audiencias decidieron dejar a Emilio Lozoya en libertad condicional, con la prohibición de salir del país, la obligación de presentarse ante el Reclusorio Norte de la capital dos veces al mes y controlado con un brazalete electrónico.

Y es que la Fiscalía no pidió prisión preventiva puesto que llegó a un acuerdo para que el exdirector de Pemex, quien huyó el año pasado y capturado en febrero en España, revele datos de la corrupción en el Gobierno de Peña Nieto (2012-2018) a cambio de un trato judicial amable.

Según se ha filtrado a la prensa, el exfucionario tendría pruebas de que el mismo Peña Nieto y su secretario de Hacienda Luis Videgaray habrían repartido sobornos a diputados de la oposición para que aprobaran sus reformas legislativas.

El actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, definió a Lozoya como “un testigo colaborador” y apoyó que reciba “ciertas consideraciones” a cambio de “conocer más” sobre la corrupción en la anterior administración.