El presidente Andrés Manuel López Obrador ha sabido ‘enfriar’ los tuits y declaraciones provocadoras de Donald Trump, su homólogo de EU, durante su primer año de Gobierno, de acuerdo con Salvador Camarena, periodista y columnista de El Financiero.

“Es una buena señal que López Obrador haya cambiado su discurso ‘peleonero’ de candidato o de eterno candidato. Es un tipo que le pone ‘muchos hielos’ cuando llega un tuit y dice ‘no vamos a contestar’. Sabe lo qué está en juego para el país si no logran esquivar esa locura de tirano que viene de Estados Unidos”, dijo Camarena en La Nota Dura.

Por su parte, la periodista Katia D’Artigues coincidió en que el presidente ha tenido cabeza fría, sobre todo en temas que sabe que moverán a la economía.

Sobre migración, ambos coincidieron en que México se convirtió en escenario de sufrimiento para migrantes derivado de la presión estadounidense sobre imponer aranceles a productos mexicanos.

“El costo no es menor, las imágenes que vimos y lamentamos de niños centroamericanos llorando, de migrantes clamando porque los dejen transitar. México se convirtió en una cosa muy fea en tema migratorio, que traiciona algunas de las nociones que México está llamado a ser, es un costo muy alto”, dijo Camarena.

“El Gobierno de izquierda es el menos solidario con los migrantes en mucho tiempo”, añadió.

Luego del operativo fallido para detener a Ovidio Guzmán, hijo de ‘El Chapo Guzmán’ y de la masacre a la familia LeBarón, en la que murieron 3 mujeres y 6 menores de edad, el discurso de López Obrador ha caducado y se deberá apresurar la gestión completa de la Guardia Nacional, consideran los periodistas.

“Culiacán nos movió a todos, es un tema que no ha parado. Son casos que han agarrado por sorpresa al discurso del presidente. A la fecha, por ejemplo, no sabemos a bien qué pasó en Culiacán”, comentó Katia D’Artigues.

“La seguridad es el lado más grave”, añadió Camarena. “La población está completamente desprotegida, sin amparo de la autoridad. Fueron dos eventos que hicieron que el presidente se quedara sin nada que ofrecer”, señaló.

“La Guardia Nacional tiene que avanzar más rápido y la narrativa o propaganda que el presidente quiere que le creamos ya no da, luego del caso LeBarón”, concluyó Camarena.